- ¿Te das cuenta que estás dejándolo ir?
-- Lo sé.
- ¿Por qué no reaccionas, haces algo?
-- Porque no quiero.
- Eso que sientes es un amor enfermizo que te ha carcomido los sesos
-- Me ha carcomido el alma, no los sesos.
- ¿Y por qué sigues aferrada a él?
-- Por la misma razón que él sigue aferrado a ella.