sábado, 18 de agosto de 2007

Ceguera emocional

Quisiera no saber lo que sé, me atormenta y en una forma violenta me arrebata el sueño.


¿Será verdad que los ojos son las ventanas del alma? Tal vez no una ventana sino un reflejo que proyecta brillo. El brillo puede implicar felicidad, desahogo, tristeza, emoción, cualquier forma.
Después de conocer esa mirada, ya nada puede ser igual. Quisiera no saber lo que sé, me atormenta y en una forma violenta me arrebata el sueño. Y cuando intenté evitar confirmarlo con las ondas que flotaron en el viento, quise taparme los oídos. Lo que pasó, no podría desearlo a nadie, es peor que la muerte. Es el horror.

7 comentarios:

Sheba dijo...

Los ojos son traicioneros, no hay secreto que no pueda verse a través de ellos. Muchas veces podemos decir 'no, no me pasa nada' y solo con ver los ojos podemos saber si esa persona nos está diciendo la verdad o no.

Anónimo dijo...

Te quedó muy al estilo de Lovecraft, que nunca te daba detalles concretos sino que hacía que tú como lector complementaras con tus experiencias personales y por eso fuera más significativo para tí
=)

Geo

Anónimo dijo...

Por eso los bizcos dominarán el mundo: nadie puede saber qué diablos están pensando.

(Ok, estoy dando un comentario absurdo, pero a veces el absurdo aliviana)

phe dijo...

No se si es al estilo Lovecraft, pero estoy deacuerdo que me dejas ver algo pero al mismo tiempo das la libertad. Me gusta y al mismo tiempo me molesta, pero en el buen sentido, porque me haces pensar...

En la película Elizabethtown... el personaje principal dice que se ha vuelto un coleccionador de "últimas miradas"... supongo que es posible coleccionar fragmentos de alma en el recuerdo... me lo recordaste.

Unknown dijo...

una mirada lo dice todo, por más que lo quieras esconder los que te conocen siempre sabrán que pasa.

Anónimo dijo...

Ceguera emocional sería como no sentir... y sí el sentir duele pero es lo que nos mantiene con vida y cuerdos

Anónimo dijo...

Eyes... nothing more cristal and clear than those two lights in our body